Más protección para los ciclistas gracias a la aprobación de una nueva ley.

Nueva ley ciclistas

Más protección para los ciclistas gracias a la aprobación de una nueva ley.

Hace unos días se aprobó la Ley de modificación del Código Penal en materia de imprudencia en la conducción de vehículos a motor o ciclomotor (11/2022 de 13 de septiembre), y a día de hoy ya se la ha bautizado como «La Ley Ciclista» puesto que supone una serie de novedades que ofrecerán más protección a los usuarios de la bicicleta.

Accidentes con ciclistas

En los últimos años, los accidentes con bicicletas no han hecho más que aumentar, especialmente en el ámbito laboral. Miles de personas en España sufrieron en el último año algún tipo de siniestro con baja cuando se desplazaban en bicicleta por motivos laborales (normalmente de ida y de vuelta al lugar de trabajo). Esta ley protegerá a los ciclistas que sean víctimas de accidente en carretera, ya que evitará que se archiven causas penales considerándolas «imprudencias leves» y dando impunidad a los conductores al volante.

Estas son buenísimas noticias, especialmente para los usuarios asiduos de la bicicleta, que se beneficiarán de grandes cambios en la vía jurídica. Los jueces y fiscales podrán ser los que den comienzo o impulsen el proceso judicial si consideran que hay una infracción grave, independientemente de si la víctima lo solicita o no.

La ley entrará en vigor cuando se publique en el BOE y servirá para que tanto peatones ciclistas reciban un trato más justo y dejen de estar en posición de indefensión frente a las imprudencias de los conductores.

Seguridad en carretera

Tanto los ciclistas como los conductores han de seguir normas claras y específicas de seguridad en carretera que les permitan convivir.

Los ciclistas deben utilizar prendas reflectantes cuando circulen en situaciones de poca visibilidad, utilizar el andén derecho siempre que sea posible, etc. Por su parte, los coches han de mantener una separación de al menos 1, 5 metros al adelantar a un ciclista, e incluso cambiarse completamente de carril en el caso de que sea posible.

Cada usuario es responsable de conocer las normas por las que se rige esta interacción bicicleta-coche para evitar cualquier problema.